Buenos días,
"Si no estás siendo tratado con el amor y respeto que te mereces, debes revisar tu etiqueta de precio. Es probable que te lo hayas rebajado mucho. Recuerda que eres tú quien dice a la gente cuanto vales. Salte del cajón de las rebajas y colócate en el lugar de los objetos de valor. No te malvendas."
¿Por qué lo hacemos?, porque lo hacemos..., nos malvendemos.
Tal vez en tu caso ahora ocurre en el trabajo, o quizá en tu entorno más próximo, y seguramente como nos pasa a todos, con las personas que más amamos, porque son a ellas directa o indirectamente a las que les consentimos todo con el consecuente e inconsciente detrimento de nuestro caché cuando no se nos valora ni respeta como es debido.
No creo que la reacción de la gran mayoría de pasar frustrados sobre este menosprecio y no hacer nada al respecto sea buena, porque como bien dice este post de Facebook, eres tú quien decide cuanto vales, tú marcas tu precio, el que todos ven. Luego, mucha parte de la culpa es nuestra por haber consentido esta desvalorización de nosotros mismos.
Pues se acabó, ¡vamos a reaccionar!, y creo que aquí no valen las medias tintas, hemos de ser drásticos, y lo más difícil, mantenernos firmes en nuestra decisión o no lograremos nada. No va a ser fácil, ¿...hay algo en esta vida que merezca la pena que lo sea?, pero creo que si afinamos bien "la puntería..." quizá hasta podamos matar dos pájaros de un tiro.
Se acabaron las rebajas... ¿Quién sale conmigo de ese cajón? ;