Buenos días,
Creo que en la literatura universal hay esencialmente dos temas, el amor y la muerte, porque el resto... son variaciones sobre lo mismo. Cambiemos de tercio en esta entrada para hablar de la segunda, y de la relatividad de todo lo demás frente a ella.
La muerte es efectivamente, y siempre bajo mi punto de vista, el otro gran tema, ese que preferimos no tocar y que tratamos de olvidar, como si no existiera...
Ahora que la esperanza de vida es alta y nos hablan de la expectativa probable de alargarla hasta los ciento cincuenta o doscientos años, yo me pregunto ¿alguien quiere "vivir" sesenta o setenta años más?, de veras que yo no, cuanto menos vivir toda la eternidad... sólo pensarlo me resulta larguíííísimo, una pesadez y además ...aterrador.
Sí que me gustaría ser una ancianita adorable, por nada querría perdérmelo, pero no durante setenta años más, no por Dios, en realidad es falsa la expectativa de vida, porque es de vejez.
Pero lo que realmente me suscita curiosidad es la respuesta a la siguiente pregunta, ¿seríamos más felices si viviésemos eternamente?, olvidemos las inconvenientes repercusiones lógicas como la demografía, esto no va de eso, va de reflexionar sobre en qué modo afectaría a nuestro comportamiento la eternidad, ¿fascinante verdad...?
"Una muerte es una tragedia, un millón de muertes sólo estadística", ¿y la inmortalidad?, ¿qué sería la inmortalidad? ; )