Buenos días,
¿Quién piensa que el ritual de la ceremonia nupcial es la escena final de un cuento de hadas?, porque... nadie cuenta qué pasó después, nadie dice que la cenicienta volvió loco al príncipe con su obsesión de limpiar el castillo, ni la de éste por la dichosa caza, jajaja...
El non plus ultra del amor romántico era el matrimonio, pero no siempre ha sido así, hacia el siglo XII existía un concepto llamado amor cortés donde el amor no tenía nada que ver con el matrimonio, ni con el sexo, era una relación entre un caballero y una dama de la corte que ya estaba desposada, así que jamás podían consumar su amor...
Eliminaban el sexo de la ecuación y perseguían algo más... divino, les quedaba únicamente la unión de las almas. Pensadlo... el sexo fue siempre la fatídica poción amorosa en la literatura de la época..., Lanzarote y Ginebra, Tristán e Isolda..., la consumación siempre llevaba a la locura, a la desesperación o a la muerte.
Expertos clínicos y humanistas coinciden en la creencia de que el verdadero amor tiene dimensiones espirituales, y el amor romántico no es más que una mentira, una ilusión, un mito moderno, una manipulación desalmada.
Y hablando de manipulación..., cuando vamos al cine y vemos a los amantes besarse en la pantalla... y sube la música... y nos lo tragamos, ¿no...? La cuestión es, ¿por qué nos lo tragamos? Nos lo tragamos porque aunque sea un mito o una manipulación, en el fondo tooodos queremos enamorarnos, ¿o no?, y... ¿por qué?, porque esa experiencia nos hace sentirnos completamente vivos, los sentimientos se elevan, las emociones aumentan, la realidad cotidiana se hace añicos y ¡salimos despedidos hacia el cielo!
Puede que solamente dure un momento o una hora, una tarde..., pero eso no disminuye su valor porque nos quedan unas sensaciones que guardaremos toda nuestra vida.
Hace tiempo leí un artículo que aseguraba que cuando nos enamoramos oímos a Puccini en nuestra mente, me encantó. Creo que es porque su música expresa por completo el ansia de pasión que hay en nuestra vida, y de amor romántico... Y mientras escuchamos La Bohème o Turandot, o leemos Cumbres Borrascosas, o vemos Casablanca, un poco de ese amor también vive en nosotros.
La cuestión final es, ¿por qué la gente busca el amor cuando este tiene o suele tener una caducidad limitada y puede ser aniquilador?, ¿qué opináis...?
Yo creo que es, como muchos de vosotros ya sabéis, porque mientras dura... te sientes... de p. m. ; )
¡¡Hooola Ana!!
ResponderEliminarCuanto de cierto hay ahí...aún así me has hecho reír jejeje
Nos queremos libres, independientes, haciendo lo que en cada momento nos "pida el cuerpo" y mucho más cuando te has intentado enseñar a ti misma que el amor no dura eternamente, no al menos en la forma que lo hemos idealizado desde niños... pero en verdad a quien no le gusta sentir el amo, pasión, cariño... y que si dura menos de lo que hubieses imaginado, al menos lo hemos sentido y aunque haya sido una vez en la vida, te sientes como bien dice D.p.m jajaja
Un besazo con amor ;)!jejej
Una de mis canciones favoritas de Fito&Fitipaldis dice, “invisible cadena que me ata a la vida”, y creo efectivamente que a lo único que te ata el amor verdadero es a la vida Sara.
ResponderEliminarSólo por haberte hecho reír han merecido la pena estas líneas. Muchísimas gracias cielo.
Un besazo
Hola Alma:
ResponderEliminar¡Qué tema!
Amor, enamorarse, sexual, etc. Como diría mi maestro Diego en mi infancia: “no confundamos la gimnasia con la magnesia aunque suenen parecido”.
El matrimonio como final feliz es una falacia, de hecho es una institución en desuso y si bien tuvo su función, también es cierto que la sociedad ha evolucionado y ha creado otras figuras jurídicas que dan seguridad jurídica a quienes las necesitan. La prueba está en que ahora para divorciarse no se requiere de justificar causal alguna más que única voluntad de alguno de los cónyuges en solicitar la terminación del matrimonio. Con el matrimonio las cosas cambian. Hay quienes cambian su forma de ser después de su matrimonio como si tuviesen una factura de propiedad del otro cónyuge, aún así, celebro a quienes honran la unión sin necesidad de formalidades eclesiásticas o jurídicas pues lo que vale es el “compromiso” moral o sentimental.
Todos, pero absolutamente todos, disfrutamos profundamente el sentimiento del enamoramiento.
Esa situación en la que las hormonas y en particular las endorfinas nos hacen ver estrellas, soñamos despiertos y deseamos compartir el 100% de nuestro tiempo con quien despierta ese sentimiento.
No hay nada igual a despertar tarde una mañana soleada de domingo y percibir ese cosquilleo entre el estómago y el vientre cuando recuerdas la noche anterior en compañía de quien te enamora; esa sensación de travesura al rebobinar una y otra vez el primer beso que llena de risas y sonrisas tu propio rostro.
Ese “cocktail” hormonal nos suele encantar, pero también nos juega malas pasadas. Es adictivo y hay quienes lo explotan como lo hacen en la industria del cine, la tv y la literatura. ¿Quién no suele soñar con tener un amor de locura? Me confieso adicto al romanticismo.
Veo que la mayoría de mis amistades están solas ya sea porque nunca han tenido una pareja estable o porque como yo son divorciados. Todos están en una búsqueda insaciable del “amor”, unas están en tratamientos reductivos, otros injertándose cabello, otros haciendo ejercicio como locos y ya tienen la zalea colgada, todos siempre pegados al Facebook atentos de que si esa persona deseada les dio “like”, o se hacen miembros de sitios para encontrar pareja, etc. Nadie en su sano juicio desea estar solo, pero la pregunta es: ¿Existe alguien ideal para cada uno de nosotros?
Y a todo esto, si no es lo mismo la gimnasia que la magnesia... ¿Qué es el amor? Me confieso neófito en la materia. Pero si me presionan les diré que la juventud se va, que la belleza física acaba con el tiempo, que vida sexual tendrá su declive y sólo nos podemos preguntar ¿Qué es lo que queda? Pues… lo que queda es el más profundo e irrestricto respeto a la individualidad de esa persona por quien sientes cosas grandes y no egoístas. De lo contrario, podrás haber tenido muchas otras cosas pero… ¿Amor? No lo sé. Insisto soy neófito en la materia.
Entiendo lo platónico de lo que relatas sucedía en la edad media; no sexo, no matrimonio, solo compatibilidad de intereses y afectos. Mmmmm… alguna vez tuve un amor así, pero ese tipo de relaciones no son para mí. Esas relaciones en las que se quiere lo imposible, en las que no puedes ser franco con tus sentimientos y pretendes que así están bien los dos. Perdón por el parangón pero es como el coitus interruptus, no hay conclusión de nada y te das cuenta que cada vez estás más insatisfecho. Me encanta una canción que habla de un amor platónico la conocía y disfrutaba desde antes y la sigo escuchando con gusto, pero en esa época era un himno para mí. Se llama “Hoy ten miedo de mí” de Fernando Delgadillo. https://youtu.be/AwtsCKXODGc
Pero no puede uno dejar de buscar amor, es contra natura y sí mientras dura te sientes de P. M. Por eso no hay que dejar de enamorarse.
P.D. Se vale buscar el amor sin hacer fregaderas y lastimar a quienes nos quieren, siempre con total sinceridad por delante.
“Enamórate Alma” eso dice la receta del doctor.
Hola Ana,
ResponderEliminarAquí hay tomate.... Anda que no has condensado tú asuntos varios en unas líneas. Atrevimiento sin par, p.m., para marearse.
Para empezar tenemos a Puccini, que contra lo que pudiera pensarse es posterior al invento del enamoramiento, pero es verdad, asumiendo que toda la humanidad enamoradiza conociera su música puede que por ejemplo el famoso "nessum dorma" fuera música propicia al estado de enamoramiendo máximo. No sé, yo creo que hay músicas todavía más propicias, pero no es este el lugar adecuado para listarlas.
Dicen los científicos que al final es una cosa de endorfinas, quítandole hierro al asunto, pero como las drogas propias son legales y mucho más baratas pues adelante, dróguense ustedes p.m., post meridian, y tambien a.m. , antes de mediodía...
Luego están aquéllas pobres almas que circulan por la vida como si fueran por un largo túnel oscuro, sin esa facilidad para enamorarse y por tanto sin esperanza en visitar el cielo antes de morirse, como mencionamos en un post de hace un tiempo. Deberíamos pensar en ellas de vez en cuando. Crear una asignatura en el colegio para enseñarselo (con música apropiada a la asignatura), y asegurarnos que aprobaban anten de darles ningún título. Yo se de algún caso que las pasaría canutas para el aprovado p.m., por méritos.
Así que por el momento, me quedo con tu alegría de p.m., perfecta mujer, ante el amor vivido, no sin cierta envidia malsana...
Mientas tanto, disfrutamos de nuestro túnel más o menos luminoso, p.m., por martinetes, que es un palo flamenco muy serio y ondo, para cantar los amores de verdad.
Un abrazo de Lolo
14:38 p.m.
Las drogas legales son la repera, jajajaja, por eso soy tan atrevida, voy siempre dopada Lolo, jajaja... Me haces reír jajaja
Eliminar¿Y por qué no saldrán de ese túnel esas almas?, ¿porque saben lo que se pierden, verdad?
Apoyo y con entusiasmo tu brillante iniciativa de enseñarlo en el colegio, y con música. Sería maravilloso salir a vivir con nociones básicas de lo realmente importante y necesario. ¡Qué gran idea!
Eres un encanto y yo no soy perfecta, gracias a Dios, pero te agradezco muchísimo tus halagos. Así da gusto escribír. ; )
Pues verás Alberto, yo admiro mucho màs a quienes lo hacen teniendo como testigo a Dios, dados los tiempos que corren..., para mí el matrimonio cristiano es eso, una pareja enamorada haciendo sus votos ante Él, todo lo demás sobra. Yo, en su momento lo hice así y por esa razón, como creyente, aunque no fuese válido, por no ser auténtico por ambas partes porque puedes engañar al mundo, pero a Dios y al otro no, ¿no crees? Y sí, cuando es así, con el “matrimonio” las cosas, desgraciadamente, cambian, y después se acaban de una forma u otra.
ResponderEliminarPuedes buscar el amor, es inútil..., no se busca, nos encuentra. Y quizá si tus amistades no mirasen tanto con los ojos y lo hiciesen más con el alma otro gallo les cantara, ¿no crees?
A ver... es cierto que ha de existir esa magia que te atrae irremediablemente, siiiii, pero ¿quién ha dicho que vaya a estar tras un injerto capilar o tras perder unos kilos? ¡Qué error!, error que he cometido siempre y antes. Lo defines muy bien, yo no lo habría hecho mejor, peeeero... una cosa es la teoría y otra la práctica, ¿a qué sí? jajaja...
Ese tipo de relaciones “corteses” no son para tí ni para nadie jajaja... van contra natura. Cuando amas necesitas amar en toda su expresión. Ojalá y me llegue la receta jajaja... ; )