martes, 8 de agosto de 2017

LLamando a las cosas por su nombre



Buenas noches,





Es verano..., Agosto..., vacaciones..., intentaba evitar polemizar con nada porque, como que no apetece..., pero coincidía hace unos días en la mesa con mi hijo Andrés en que Maduro nos estomaga.

¿Qué pasa con el comunismo, los comunistas y en particular con este régimen totalitario?, ¿Lo vemos sólo nosotros aquí en casa, o se echa de menos la opinión y la condena de este terror en todo el mundo?, es increíble..., son prácticamente intocables, pero ¿por qué?

Es muy difícil encontrar una buena crónica sobre el enquistamiento de la situación en Venezuela que aborde claramente por qué está ocurriendo y que llame a las cosas por su nombre. 

Personalmente y visto lo visto la única forma que tengo de sacar conclusiones es preguntarme quienes son los defensores del régimen e ir tirando de ese hilo. 

Quienes hablan apoyando al gobierno impuesto, desde Venezuela, los partidarios del régimen, desde Irán todos los que tienen intereses, Hezbolá y cada actividad atribuible a los intereses de los ayatolás, todos los intereses que se extienden hasta allí por su importancia en la protección del tráfico de drogas.

No hay o son escasas, las referencias en los medios de comunicación al vicepresidente Tareck El Aissami, miembro de alto nivel de Hezbolá en Venezuela, ni a sus intereses multimillonarios gracias a este tráfico.

Tampoco sobre quienes dirigirán la Constituyente que han votado, nada... Nada sobre Diosdado Cabello, jefe del poderoso cártel de los soles, narcotraficantes internacionales, organización criminal a la que pertenecen también algunos destacados generales.

¿No es esto más que suficiente para atraer la atención de los medios y de la comunidad internacional cuando son el terrorismo y el narcotráfico los enemigos que proclaman su propósito de acabar con la civilización?

La verdad, no creo que esto ya tenga nada que ver con política ni ideologías aunque supongo que viene bien que el comunismo y el socialismo queden totalmente desacreditados, ya ni recordamos que comenzó como fascismo o algo muy parecido, pero ¿ahora eso qué más dá?, no hay un proyecto político, esto, llamándolo por su nombre es puro delito común y esta gente ya ni se molesta en disfrazarlo de socialismo como al principio.

Son macro atracadores sometiendo a treinta millones de rehenes sin tiempo ni voluntad de disimularlo, ...si protestas te matan.

El resto del mundo espera..., tampoco saben muy bien qué hacer, y supongo que más pronto que tarde no será un buen burócrata quien "arregle" esta situación, apuesto a que lo dejarán en manos de "algún petrolero" capacitado legalmente para, por ejemplo, abrir las puertas al Comando Sur.

Tiempo al tiempo...          ; ) 



9 comentarios:

  1. Hola Ana,

    Todo esto tiene un montón de explicaciones.
    Yo tiendo a ser cuidadoso con las que me vienen dadas. Nunca son inocentes (que si Iran, que si los carteles del narcotráfico...). Seguro que hay algo o mucho de todo eso pero las explicaciones suelen estar delante de nuestras narices y desde luego no tienen nada que ver con el "socialismo" o el "comunismo", palabras a las que se les atribuye una maldad sin límites y que reposan en los diccionarios políticos sin meterse con sus vecinas, las pobres.

    Se llama (la explicación) maldad, corrupción, egoísmo, incompetencia y otras muchas cosas, pero sobre todo se llama ruptura.

    Y esa ruptura, el pecado original, se produjo hace muchos años con un tal Chávez, que no siendo más que un golpista ignorante, se convirtó en héroe popular siguiedo la larga tradición de caudillismo imperante en aquéllas tierras.
    La democracia es algo frágil. Una vez se le rompe una costura, se deshace con rapidez, y esa es una lección a aplicar en todas las latitudes, incluída la nuestra, por eso son tan importantes las formas....

    Un abrazo / Lolo

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    1. De acuerdo en todo Lolo, "la explicación" tiene nombres y apellidos, unos ya no están, y con los que son ¿debemos seguir mirando para otro lado?, como estamos ante el mal de moda en ascenso en el mundo, ¿lo toleramos?

      No sé tú, pero yo estoy asqueada de ver lo mismo con distintas variantes mire a dónde mire, ... y nadie hace nada, o al final lo hace siempre el mismo por un precio claro. Es otro circo, en el que mueren personas con vidas como la tuya o la mía todos los días, y no hablo sólo de Venezuela, y no pasa nada, es más, últimamente hasta he escuchado quejarse de lo reiterado de los males del mundo en los informativos.

      Si a tu explicación, sabida y reconocida, le añadimos otras que no lo son tanto, como la apatía, el desinterés, el egoísmo o el materialismo absurdo que nos invade, obtendrás el campo de cultivo perfecto para que todos los asesinos campen por sus fueros.

      Venezuela, Siria..., y una lista interminable de seres humanos están pidiendo ayuda, y yo no soy responsable de los pecados de mis padres, quien quiera seguir en su sofá evitando la realidad allá ellos, yo pido ruptura, otra ruptura distinta.

      Gracias, tu comentario es acertado como siempre, pero echo de menos soluciones "encargado de exteriores" ; )

      Un abrazo enorme

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  2. Venezuela, pobreza de muchos, exilio de otros tantos, lucha de todos... Narcotrafico, guerrillas, corrupción, los males de moda pero de siempre. Ante la ignoracia de muchos unos pocos se hacen fuertes. Pero, como a mi no me afecta...pasividad. Ese es el mal de nuestra sociedad, sin menospreciar los que has nombrado. Pasividad e ignnorcia materialista. ¿Que hacemos ante eso?

    Besos besos.

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    1. Utilizar con sabiduría la democracia porque es un privilegio frágil, como dice Lolo.

      Ser humanitario, generoso y responsable, porque lo que sucede en el mundo nos afecta a todos porque todos padecemos males parecidos y el remedio no está en manos de quienes lo causan, está en las nuestras.

      Besos besos

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  3. Hola Ana:

    He de contestar ésta entrada a tu blog tarde y sólo porque tú me lo pides, porque de mutuo propio te he de decir que hablar de política me causa escozor, picazón, urticaria, náuseas, etc.

    Después de una semana de festejos te hablaré de lo que opino de la política. No de la filosofía sino de la realidad y de su aplicación actual.

    Perdón por lo escatológico de mi comentario pero el mejor parangón que encuentro a la política son las excreciones humanas.

    No es nuevo decir que los políticos son la expresión viva del engaño, del hurto, de la rapiña, del abuso del poder y de dar preponderancia a sus intereses personales o de grupo o partido antes que a los intereses de sus representados, de sus mandantes o por decirlo de otra forma, del pueblo.

    Hace algunos ayeres en el porche de mi casa en una noche de 32 grados centígrados y con una cerveza en la mano platicaba con un amigo y vecino del tema de los políticos; y a groso modo expresé lo mismo que en el párrafo anterior. Él, mi amigo y vecino, me dijo que yo no debía generalizar y me puso como ejemplo a un político mexicano llamado Luis Donaldo Colosio, quien parecía ser la panacea para los males que aquejan a mi México, pero fue muerto a balazos presuntamente por órdenes del propio presidente de la República Carlos Salinas de Gortari, por habérsele salido del “huacal” (control).

    Yo le espeté que con mis reservas, también podríamos incluir a personalidades internacionales como John Fitzgerald Kennedy, Nelson Mandela, Mahatma Gandhi y muchos otros, pero que ellos no eran políticos y por eso les asesinaron o les “enterraron” en prisión, porque para ser político se debe pertenecer a cierta calaña en la que los defensores de los derechos de las masas no tienen cabida.

    Así, con éste preámbulo te puedo decir que en una comida en el restaurante de mi hermana y mi cuñado me presentaron a unas chicas venezolanas que se vinieron a México por miedo a la guerra que se está gestando en su país y nos platicaron en la sobremesa sus opiniones de lo que sucede en su país.

    De sobra está decirte que algunos de los comensales expresaron su repudio a la “miseria‘ que vivían en Venezuela y que “sabían” que no tienen medicamentos, toallas femeninas o papel sanitario, que las personas mueren a diario en los hospitales por falta de atención, que es un viacrucis conseguir alimentos, que Maduro es un idiota que tiene reprimido al pueblo y a la oposición, que Chávez sembró la semilla de la discordia y que Maduro no le llega a los talones a Chávez, etc.

    Mientras mi cuñado y su amigo Mike expresaban lo que acabo de escribir, Martha y Bertha miraban muy atentas sin interrumpir, pero yo veía en sus ojos descontento y desapruebo de lo que estaban escuchando y reconozco que pensé que ellas eran Chavistas y que por esa razón desaprobaban lo que estaban escuchando; así que una vez que terminaron de hablar los otros Martha dijo algo más o menos así:

    “En Venezuela estamos tan jodidos como en México. Nosotras venimos a México porque tememos que haya una guerra civil que de hecho ya la existe en algunas partes de Caracas.

    No es verdad nada de lo que han expresado, pero entendemos porque lo dicen, porque nosotras mismas hemos visto las noticias en México y eso es lo que dicen, pero la realidad es otra.

    En Venezuela tenemos medicinas, toallas femeninas y papel de baño, comida de acuerdo al presupuesto de cada quien y atención médica con medicamentos. El salario mínimo en Venezuela es más alto que en México, allá es de USD $ 10.00 y en México es de USD $ 4.50”. Hubieras visto la cara de todos, yo casi me carcajeo en ese momento.

    Continúa...

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  4. Viene del anterior...

    Continuó diciendo algo así: “Cuando digo que en Venezuela estamos jodidos es porque no tenemos opciones por un lado está Maduro que pugna por perpetuarse en el gobierno sin importar nada, y ese tiene de pendejo lo que yo de astronauta; y por otro lado está la oposición que son una coalición de rufianes que antes de Chávez ya habían saqueado al país y que no conformes buscan llegar otra vez haciendo uso de la violencia y seguir robando. Ahora que volvieron a detener a capriles salió su esposa en televisión diciendo que había que llamar al pueblo para defender a la libertad, cuando lo que quiso decir es que salga el pueblo manipulado por la derecha a pelear con el pueblo manipulado por la izquierda, mientras ellos no se enlodan ni se arriesgan.

    Los norteamericanos están apoyando a la oposición porque lo único que les interesa es desestabilizar al pueblo venezolano y tener un pretexto para invadirnos y establecer un gobierno impuesto por ellos y de esa forma obtener el petróleo que pertenece a nuestra nación, para ello manipulan todas las noticias para obtener la simpatía del mundo.

    Pienso que tener petróleo es una maldición porque atrae a los abusivos y por mí que se vayan al carajo Chávez, la oposición y los norteamericanos”

    De todo lo relatado voy a concluir de la siguiente forma sin que ello signifique que pretendo coartar la libre expresión a la que cada quien tiene derecho.

    Lo mejor es no expresar, opinar o criticar sobre lo que desconocemos. Nuestra fuente de información está manipulada y es tendenciosa. Y por sobre todas las cosas no hay políticos buenos que quieran a su país y a su gente, no hay buenos ni malos porque del lado que se mire sólo hay intereses y no son los intereses de los gobernados.

    Hace algún tiempo pensé que el problema de mi país es que nadie de clase gobernante quiere a México. Sin afirmarlo al 100%, te puedo decir que la mayoría de los políticos del mundo se quieren más a sí mismos que a sus naciones.

    Un abrazo Ana.

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    1. Totalmente de acuerdo con tu opinión sobre los políticos, y sí, desgraciadamente se deshacen de quienes no comulgan con sus intereses, allí a balazos, aquí ocurren accidentes y muertes repentinas.

      También coincido contigo en que la información nos llega manipulada de forma distinta según su procedencia, y no excluyas a Martha porque también noto parcialidad en sus palabras. Conozco a venezolanos que tienen una versión distinta. Tal vez cada uno cuenta la "fiesta" según le va en ella.

      Pero dos cosas Alberto, no me pidas que sea conformista y mire para otro lado, porque ese es el mayor mal que nos afecta. Y en segundo lugar y a pesar de la manipulación, si hoy en día no somos capaces de indagar en busca de la verdad, quizá la culpa de no encontrar la verdad no sea de los que la manipulan, sino de quienes no la buscan.

      Gracias por tu comentario, aunque no me ha aportado nada nuevo, porque sé el esfuerzo que te ha supuesto hacerlo.

      Un abrazo

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  5. Hola Ana:

    Nunca reviro a tus contestaciones pero es que... Nooooooo. Jamás te pediría conformismo porque sé que no eres conformista y yo no le pediría a nadie algo así.

    Estoy plenamente de acuerdo que habrá quien piense diferente, esa es la razón por la que están peleando, pero yo no me atrevo a opinar quién tiene la razón porque no me corresponde dar opiniones y por que como dije no sabemos la realidad de las cosas, apenas los propios Venezolanos, pero además mi opinión en una mesa no cambiará su realidad, es decir, Alberto Peña como mexicano no es un elemento eficaz de cambio por el sólo hecho de disertar u opinar sobre un problema.

    Hace tiempo escribí en mi muro de Facebook una reflexión: ¿Qué hacemos para verificar la información? Después te la comparto, pero mi punto es que no hacemos verdaderas averiguaciones para conocer la realidad formal de las cosas.

    Te agradezco que comprendas mi desprecio por el tema "política" en verdad me desagrada. Es para mí un gusto expresarme en tu blog siempre lo he dicho, y aunque me gustaría aportarte algo no me es posible porque creo que tú sabes más del tema y estoy consiente de que no es una competencia, lo entiendo y agradezco tu aportación que a mí sí me enriquece porque como te he escrito en otras ocasiones me hace pensar, me mueve.

    Pásala bien.

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    1. Hola Alberto, me encanta que revires, ¿se dice así?, mi respuesta. El hecho de que me haya centrado en el gobierno no significa que "absuelva" a la oposición. No, no podría dar o quitar la razón a nadie, me falta información veraz, pobre de mí, sólo sé que no sé nada por eso me pregunto todo.

      Pero es una lástima que no apoyemos más a los inocentes que pagan las consecuencias sean del bando que sean y estén donde estén.

      He vuelto a releer tu escrito y estoy, una vez más, totalmente de acuerdo de cabo a rabo. Tanto es así que, si me lo permites, me encantaría publicarlo aquí, yo misma no lo habría expresado mejor.

      Muchísimas gracias y discúlpame, supongo que quería tener otro punto de vista que no hubiese escuchado ya.

      Un abrazo enorme

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